Después de tantos años, Dan Slott finalmente abandonó Amazing Spider-Man, y la expectativa era grande al saber que el nuevo guionista sería Nick Spencer, ni hablar del artista Ryan Ottley, conocido por haber dibujado casi la totalidad del comic Invincible de Robert Kirkman para Image Comics.
¿Y qué me pareció este primer número?
Una belleza.
¿De qué va?
Peter, con sus problemas habituales, tiene 2 roommates (uno bastante complicado), bardos académicos, bardos laborales y bardos de prestigio superheroico. Típico. Robbie, Mary Jane, La tía May, Kingpin y Mysterio son algunos de los personajes que toman más presencia que el resto. Y hasta tenemos tiempo para un panorama sobre cómo está el entorno de Peter: Alcalde nuevo, relación con héroes, y la miseria rutinaria que lo caracteriza.
¿Qué onda los villanos?
Por suerte no vuelve Norman Osborn, ni el simbionte. Personajes que quedaron relegados o no se les daba pelota en la serie principal de nuestro héroe, son los que vuelven a tomar la titularidad. Y era hora, banco. Sí, hay una movida clara teniendo en mente la próxima película de Spider-Man, pero eso pasa siempre y acá no molesta.
¿Y qué tiene de novedoso?
Spencer se toma la molestia de traer elementos clásicos del personaje y presentar un primer número con muchas puntas nuevas para explorar. Villanos (sí, plural), interacciones, personajes soporte, intereses amorosos, relaciones familiares, laborales y académicas. Y sí, con lo que acabo de enumerar, básicamente hablamos del Spider-Man que todos conocemos. Y no podía faltar esa "Parker's Luck", que acá se hace presente.
Acá no tenemos al Nick Spencer de política y espionaje de Captain America. Más bien, por como narra este primer número, pareciera ser una versión suavizada de Morning Glories con muchos elementos de su excelente Superior foes of Spider-Man (que, ey, se trajo varios personajes de ahí para volver a usar y estoy más que conforme con ello). El diálogo casual que no abusa del humor pero igual puede sacar sonrisas, es uno de los fuertes de Spencer, y hace gala de ello. Y mantiene una coherencia con los personajes, los escribe como han de ser y no como piezas funcionales de un guion que los intenta meter a la fuerza.
Ottley es todo un punto a explorar. Particularmente amo su arte, y me cuesta mucho no ver a Mark hablando con Eve pero con distinto color de cabello, cuando veo a Peter con Mary Jane. Es dinámico, es entretenido y puede darle una marca personal como lo supo hacer Humberto Ramos en su momento.
¿Engancha?
Definitivamente sí, es un excelente salto para un número 1 (así de mentirosos como suelen ser casi todos los número 1 en el mainstream y todo). Los que abandonaron Amazing previamente por Dan Slott, tranquilamente pueden agarrar acá que, los pocos elementos que mencionan, son explicados perfectamente y de forma casual en diálogos o voces en off. Tengo muchas ganas de ver como se desarrollan varias tramas que se plantearon, que pueden dar para un lindo desarrollo.
En definitiva, lo recomiendo. Tiene ese gustito a comic de Spider-Man que hacía rato no leíamos en Amazing, y puede llegar a atraer y atrapar a varios lectores viejos (y nuevos).
Y estoy seguro que más de uno, por fin, va a sentirse feliz por cierto acontecimiento.
Finalizo la breve reseña con un pequeño gran homenaje que tiene este número: El Anual #1 de Sensational Spider-Man del año 2007, de Matt Fraction y Salvador Larroca (sí, esto es una recomendación implícita, si no lo leyeron, ¡no sé qué están esperando!)