Hay hechos que suceden una vez en la vida, de esos de los que estamos orgullosos de ser parte, ya sea por casualidades o por afinidades. La mención no es menor, ya que este año Batman cumple 80 años de vida y también festeja la publicación de su Detective Comics #1000. El sábado 27 de abril en la comiquería Meridiana Cómics se llevó a cabo un festejo que tuvo una muestra central y reunió a grandes baluartes del ámbito de la historieta local y a muchos seguidores del encapotado de Gotham City.
En Caballito, la hora citada era a las 15.30, pero desde antes ya se podía vislumbrar dos enormes filas que desbordaban los pasillos de la galería en la que está ubicada la comiquería. En ellas, grandes y chicos tenían al menos una de las prints que el local obsequiaba a los fanáticos, que eran reinterpretaciones y homenajes de los artistas a las tapas originales de distintos números de Detective Cómics. ¿Los artistas? Quique Alcatena, Germán Peralta, Darío Brizuela, Aleta Vidal, Salvador Sanz, Luciano Vecchio, Manuel Silva y Omar Francia –que actualmente vive en Estados Unidos, pero participó a la distancia a través de una obra inspirada en la cover de Detective Comics #587 del icónico Norm Breyfogle-. En la entrada del local, y en ambos lados, había dos mesas largas en la que los artistas compartían espacio y firmaban para todos los presentes.
Uno de los tantos jóvenes que esperaban pacientemente fue Tomás Martín Saucedo, que llamó la atención por su cosplay de Nightwing. Como tantos otros, fué con su padre para conocer a los dibujantes, recorrer la comiquería y llevarse algunas obras a su casa. “Admito que me gusta más Dick Grayson que Batman. Además tenemos un juego familiar en la que mi viejo es Batman, yo soy Nightwing y el menor es Robin”, reconoció el chico, respecto al gusto heredado. Su comienzo con las lecturas del primer compañero de Bruce Wayne fue en The New 52. “Fue inmediato, me encantó”, sentenció.
Con tantos años de vida y con tantos escritores y dibujantes encima, Batman traspasó varias generaciones. Una de ellas fue la de Esteban Villarruel, que recordó sus viajes a Mar del Plata de niño y el momento en que se topó con una historieta del murciélago realizada por Jim Aparo, junto a una enorme pila que contenía historias de Nippur de Lagash, Condorito y Dartagnan, entre otros. Pero hubieron dos hechos que lo marcaron a fuego con el caballero de Gotham: “Con la película de Tim Burton de 1989 no hubo vuelta atrás. Y con el Dark Knight Returns de Frank Miller me di cuenta que ya era mayor de edad”.
Hoy ya es padre y, curiosamente, su hijo cumplió nueve años el mismo día del festejo. Por eso se ocupa de llevar dos prints de Salvador Sanz firmadas, que están inspiradas en la tapa de la saga The Black Mirror hecha por Jock. Para él, Batman significa un montón de cosas, como el hecho de que gracias a él disfruta de la lectura de los cómics. “Y además porque fue un antes y un después en la historia de todos los héroes”, Significa un montón de cosas. Primero y principal, gracias a él disfruto de la lectura de los cómics. Disfrutar una de sus historias, ponerte en el papel de detective. Además cambió la metodología. Los vigilantes nocturnos antes de Batman y después de él. "No concibo un mundo sin Batman”, concluyó antes de salir como aquel niño que descubrió aquella vieja revista. Con una gran sonrisa en el rostro.
No concibo un mundo sin Batman - Esteban Villarruel
Entre tanta firma, Luciano Vecchio se hace un espacio para tomar un café y rememorar: “La primera vez que conocí a Batman fue en la tele con Los Superamigos y luego en las revistas de Novaro. Desde aquella historia de Batman y Robin contra los Vampiros que forma parte de mi vida”. Su interpretación fue la Detective Cómics #27, un gran desafío por la “reinterpretación del primer traje y por darle el respeto que merece a algo tan clásico”. ¿Los motivos de la elección? “Esa tapa es como una pintura en términos grantmorrisoneanos y tiene mucha energía cargada de décadas. Es una invocación muy fuerte”, explicó. Por último, Luciano sentenció: “Hoy el personaje funciona más como una metáfora de procesos intelectuales y del viaje interno por la psiques. Eso es más interesante que intentar llevarlo a un plano de realismo”.
En la otra mesa, Aleta Vidal vistió una remera roja con la cover de la Detective Cómics #566 y firmó su homenaje al número 369, en la que Batgirl se disputaba a Robin con el mismo encapotado. “Hay bastantes personajes femeninos, pero debería haber más. Sin embargo, como autora me molesta que todavía se hable de si a tal personaje le corresponde tal o cual, cuando ya debería estar resuelto”, sentenció la autora. En este sentido, agregó que la solución es que se sigan haciendo personajes femeninos y se visibilice más a las dibujantes y a las escritoras.
A unos metros, Quique Alcatena, renombrado dibujante argentino que ilustró al célebre Batman Pirata (Detective Comics Annual #7), charla animadamente con cada fanático que le solicita su firma. Su trabajo consistió en la interpretación de cinco tapas. Una de ellas es la célebre Detective Cómics #241 The Rainbow Batman!, con los diferentes trajes coloridos del vigilante nocturno. Toda una obra de la Silver Age.
La otra parte del evento continuó dentro de la comiquería, en la que había bateas llenas de historietas sobre Batman a precio de oferta. Sin embargo, la frutilla del postre estaba en las nuevas vitrinas. Allí chicos y grandes se maravillaban y se fotografiaban con esculturas, figuras e issues históricos y originales del hombre murciélago. Es así que las distintas etapas del personaje, representadas en una gran exhibición, cohesionó de forma perfecta en un multiverso batmánico -por llamarlo de una forma- detrás de una gran vidriado.
De esta forma se observaron representaciones de Carmine Infantino, Frank Miller, Bob Kane, Dick Sprang, Darwyn Cooke, Neal Adams o Jim Aparo, entre otros. Incluso hubo lugar para las célebres versiones animadas como Batman: The Animated Series, Batman Beyond o Justice League: Gods and Monsters. Y también para sus contrapartes live action hechas por Adam West y Ben Affleck.
Pablo Condarco estuvo sacando fotos hasta que la batería de su celular dijo basta. También estuvo largo revisando bateas, hasta que finalmente se decidió por unos números post Rebirth. “Trato de ponerme al día con las lecturas y este evento es una buena excusa para eso”, dijo entre risas. Por su parte, contó que su relación con el mundo de Gotham comenzó con la serie animada de los 90. “Desde ese momento no paré”, agregó y enumeró las series de Batman Beyond, Justice League y Justice League Unlimited. Para finalmente terminar comprando cómics y figuras.
Al llegar el final del evento, Salvador Sanz continúa firmando prints sin parar y con el buen humor que lo caracteriza. El evento se había gestado desde noviembre pasado, cuando el número mil de Detective Cómics estaba a la vuelta de la esquina. Desde la comiquería se contactaron con los artistas y les comentaron la idea, a la cual se sumaron sin dudarlo. Javier Ceriani -uno de los organizadores y parte del staff de Meridiana- vigila que todos se lleven su regalo a casa.
“Si no renovamos la generación de nuevos lectores, esto se va a ir extinguiendo de a poco”, sentenció, en relación a la cantidad de niños y de familias que estuvieron presentes. Y agrega: “La tienda de cómics tiene que tender a una apertura de nuevos consumidores. Para tratar que la primera lectura de un niño o un adolescente no sea algo conyuntural, sino que transcurra su vida como lector y tenga cierta permanencia. Si esto no se logra, se va a ir extinguiendo de a poquito”.
Si no renovamos la generación de nuevos lectores, esto se va a ir extinguiendo de a poco - Javier Ceriani
Otro de los puntos fuertes fue la muestra, que contó con material de la colección personal de Javier, en la que se mostraron cómics originales, figuras y esculturas -algunas de ellas son trabajos de argentinos-: “Soy fan de DC y la exhibición muestra ese fanatismo por el coleccionismo extremo. Queríamos que la gente lo viera de primera mano, además de anexar algo más al evento”.
Las mesas se apilaron en la entrada del local y Sanz saludó hasta la última persona. La galería está por cerrar. “El saldo es positivo total por el hecho de tener a todos los artistas juntos y que podamos regalarle su arte a la gente”, afirma con cansancio y satisfacción, después de más de cuatro horas. A su vez confirmó que en un futuro posiblemente se realicen más eventos y presentaciones. ¿Quién dijo que 80 años y mil números no son nada?
*Agradecemos a Paula Martínez por las fotos tomadas en el evento que ilustran esta nota y a Meridiana Comics por llevarlo a cabo.