Quinta entrega de la historia que nos está contando Jonathan Hickman, con arte de Pepe Larraz. En esta ocasión, la cantidad de información que se nos presenta para crear una cosmología amplia, se limita.
No hay mucho que aclarar o analizar porque el número se centra en la acción, dándonos un descanso de tanto concepto de ciencia ficción dura y retomando el espíritu de los mutantes en sus cruzadas temporales.
Un futuro pasado
Sin duda alguna, la revelación más interesante a nivel narrativo es descubrir que el futuro que estábamos viendo no es nuestro futuro, sino el futuro de la novena vida de Moira. Sí, Sol Mutants vs Nimrod, no es un futuro derivado de la House of X. Es, de plano, el futuro que intenta evitar en su décima vida.
La ascensión humana
Conocemos más detalles sobre el tema de la ascensión que atestiguamos en el número anterior, en este caso con la inclusión de la Church of Ascendancy. La humanidad es imperfecta, y necesita de la tecnología para evolucionar, ya que rechaza a la naturaleza que engendró a los mutantes. Este tipo de conflicto es un excelente punto de quiebre para el eterno enfrentamiento entre humanos y mutantes que tanto conocemos, puesto que ahora la humanidad es irrelevante y la disputa se centra entre los verdaderos reemplazos de la misma: los herederos artificiales (tecnología) o los herederos biológicos (mutantes). Nimrod deja claro que le importa poco la humanidad, y ese es un punto vital.

Un presente pasado
Ahora tiene sentido el conocimiento del Professor X sobre el posible origen de Nimrod y la misión que encomienda para destruir a Mother Mold. La información que adquirió Moira en su anterior vida es vital para poder evitar ese futuro en esta nueva encarnación.

Queda ver el papel que va a jugar Apocalypse en esta historia, pero por el momento parece prometedor e interesante que se lo incluya como parte fundamental del conflicto, sin ser el antagonista.
La vida faltante
Moira vio necesario "romper las reglas" en su décima vida, y con todo el conocimiento adquirido en su novena vida, el juego va a cambiar. Sin embargo, su sexta vida sigue siendo un misterio. Probablemente haya sido testigo de hechos importantes que repercutirán a futuro (¿o pasado?)
Veredicto
Es un muy buen número, que inevitablemente se siente menos potente que los anteriores por carecer de tanta información. Pero avanzar en las revelaciones es importante, y el hecho de la confusión con las líneas de tiempo para sorprender al lector, en definitiva, funciona. Y a nivel artístico, probablemente, sea de lo mejor que podamos ver en la semana
Por el rumbo que está tomando la trama, es de esperar que en los próximos números de House of X el conflicto principal esté en el presente, en el ataque de Cyclops y compañía a Orchis.
